¿Te acuerdas de mí?

Me resbala si me odias o me amas. Si no soportas los domingos o si vas hablando mal por ahí de mí. Si eres victoria o fracaso. Si te sigue faltando cerebro o si te sigue sobrando de ahí abajo. No me han quedado cicatrices de la ostia que nos pegamos, ni refugios, ni paisajes, ni canciones que recordar. He vuelto a nacer y he vuelto atrás. Ahora soy invencible, imperfecta, sincera y rápida. Vuelvo a las andadas, que maravilla, ostia, quien me lo diría.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Prefiero fumarme el arco iris

Quiero estar contigo para siempre.